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La alimentación de 2 a 5 años

La alimentación de 2 a 5 años

Tu retoño ya tiene 2 añitos, así que ha dejado de ser un bebé para ser un niño.

Ya come de todo, o eso es lo que intentamos los papás (muchas veces sin el resultado esperado)…
A partir de ahora, apenas existen restricciones con los alimentos, sin olvidar que aún existe peligro de atragantamiento con alimentos como los frutos secos, palomitas, etc.)
Hay pediatras que recomiendan el consumo de estos alimentos a partir de los 3 años y otros lo aconsejan a partir de 5 años.

Muchas veces, poner en práctica unos hábitos de alimentación (desayuno, almuerzo, comida, merienda y cena) es complicado.
Tal vez tengas que ir a trabajar muy temprano y tu peque ha de quedarse en casa de alguien, o tienes que llevar a tu hijo mayor al colegio o… infinidad de situaciones que hacen que nuestra vida sea frenética.

Dentro de tu situación y posibilidades, tienes que intentar ofrecer a tu pequeño una dieta variada donde incluyas lácteos, verduras, cereales, carne, pescado y fruta.

La alimentación a partir de 2 años

A esta edad, tu pequeño/a ya puede tomar leche de vaca entera y aunque en el mercado existen leches de crecimiento, la OCU no recomienda su consumo ya que suelen contener más azúcares, aromas, etc..
Es bueno que tu peque se beba la leche en vaso y deje de lado el biberón (si no lo ha hecho ya…).

La cantidad de lácteos recomendada por los pediatras es de 2 a 4 raciones, en las que se incluyen el queso y los yogures.

Para comer o cenar, puedes utilizar unos platos que vienen divididos en tres partes y así distribuir pequeñas cantidades de diferentes alimentos.

  • Un poco de carne o pescado
  • Verdura, patatas, arroz o pasta
  • Ensalada o pan

Aunque puede seguir tomando purés, tu pequeño/a tiene que ir acostumbrándose  a masticar ya que, aunque coma menos cantidad, mejora su desarrollo de mandíbula y dientes.

Si todavía no has conseguido que tu peque coma de todo, no desesperes, yo tampoco lo he conseguido (y mira que le pongo empeño…todo el del mundo), pero seguro que con paciencia, lo lograremos.

Todas las tardes intento que mi peque coma algo de fruta, se la preparo a trocitos, más grandes, más pequeños, en almíbar y…sólo ha jugado, chupado y después tirado. Eso sí, seguido de un puaaajjjj muy simpático.

Costumbres poco saludables que deberías evitar

Hay costumbres que tomamos de otras generaciones, o que pensamos que como algo es sano, podemos ofrecer a nuestro pequeño un exceso de cantidad, y en ocasiones nos equivocamos.
Por eso, te enumero las costumbres más populares que deberías evitar:

  • Tomar demasiados lácteos. Con 4 raciones como máximo de leche y derivados es suficiente. Piensa que si come más cantidad de estos alimentos, comerá menos de otros. También, un exceso de lácteos puede provocar extreñimiento (como me pasó con mi hijo mayor, que comía petit-suisse sin moderación, claro, no comía otra cosa…)
  • Evita los zumos envasados. Ya sé que son mucho más cómodos y están muy ricos, pero lo único que aportan es azúcar.
  • Chucherías, cuanto más tarde en probarlas, mejor.
  • Obligar a tu pequeño/a a terminarse toda la comida, de hecho, esto puede provocar el efecto contrario y hacer que tu niño rechace la comida. Comerá lo que necesita, por ejemplo, mi pequeña, unos días come que rebaña el plato e incluso pide más y otros no se come ni la mitad…ni nada.
lacteos

La alimentación de 3 a 5 años

La verdad, es que la alimentación en esta etapa poco dista de la de los 2 años.

Tu pequeño empieza el cole y sería bueno crear un hábito de desayuno para que afronte cada día lleno de retos, rebosante de energía. Puedes ofrecerle un vaso de leche con galletas, tostada con aceite, tomate o queso, un vaso de zumo o una fruta.

desayuno

Hay muchos niños (y mayores) que no desayunan, ya sea por falta de tiempo, por no tener hambre o por muchas otras razones, pero hacerlo es algo importante, sobre todo, para tu peque.

De momento, yo tengo los dos casos en casa. Mi hijo mayor (13 años) no desayuna antes de ir a clase porque no tiene hambre, no hay manera oye, incluso le entran ganas de vomitar, así que no come nada hasta la hora del almuerzo.
Sin embargo, mi hija pequeña (2 años) nada más levantarse, se toma un buen vaso de leche (y a veces repite…)

A la hora de la comida y cena, hay que continuar ofreciendo una dieta saludable y equilibrada.
Si tu hijo/a no es buen comiente y tienes la oportunidad de que se quede en el comedor escolar, es una muy buena opción que te podría ayudar en la alimentación.
Yo lo hice con mi hijo mayor (comía fatal) y la verdad es que me funcionó tan bien, que desde los 3 añitos y hasta que finalizó la etapa escolar, estuvo comiendo en el colegio.

Y para terminar, decirte que para la merienda, puedes ofrecerle un bocadillo pequeño de embutido.

Gracias por tu lectura y espero que te haya servido de ayuda.

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