Semana 6 de embarazo

Al comenzar la semana 6 de embarazo, tu pequeño embrión medirá entre 2 y 4 mm, pero al finalizarla, su longitud estará entre 5 y 6 mm. Estas medidas corresponden a las tomadas desde la cabecita hasta el final de su columna vertebral.

Así cambia tu bebé en la semana 6 de embarazo

En esta semana se produce un cambio visual muy importante, ya que ahora, tu bebé tiene la forma de una habichuela. Además, es el comienzo de la organogénesis, es decir, el desarrollo de los órganos principales.

En los lados de tu pequeña habichuela, se distinguen unos pequeños brotes que próximamente serán los bracitos de tu bebé. En este momento, también comienza el desarrollo de la mandíbula y el cuello, pero por el momento, no son visibles.

El tubo neuronal se está cerrando para después formarse el cerebro y la médula espinal.

A ambos lados de su pequeña cabecita, se pueden apreciar unas delicadas pinceladas, que son el origen del oído interno y ojos.

Se desarrollan unas pequeñas protuberancias que terminarán convirtiéndose en los bracitos y piernecitas.

Al finalizar esta semana, tu habichuelita tiene forma de C y se pueden distinguir perfectamente la cabeza y la cola.

¡Ya es posible escuchar los latidos del corazón de tu bebé! Se está formando el corazón de tu bebé, que aunque ahora mismo cuenta con sólo dos vasos sanguíneos, ya ha comenzado a latir y lo hace vertiginosamente, ni más ni menos que a unas 150 pulsaciones.

Además de todo esto, el sistema digestivo empieza a formarse y la cavidad amniótica se llena de líquido amniótico, por lo que tienes a tu habichuelita flotando en una protegida burbuja, que a su vez, continúa su unión con la pared de esta cavidad mediante el cordón umbilical, que todavía se está formando.

En estos momentos, la vesícula vitelina es la encargada de proporcionar los nutrientes esenciales al embrión mediante la membrana, ya que la placenta continúa formándose.

Síntomas o cambios que tiene mamá en la semana 6 de embarazo

Como ves, el desarrollo de tu bebé está lleno de cambios en todo momento y eso, puede provocar que mamá tenga síntomas variados durante esta semana. Aunque no todas las futuras mamás tienen los mismo síntomas, incluso hay quien no tiene ninguno, los más comunes en mujeres embarazadas en este periodo son:

• Volumen de pecho: Seguramente, tus pechos hayan aumentado de tamaño, del mismo modo lo habrá hecho la areola y su color haya tomado un tono más oscuro. Además, los tubérculos de Montgomery (esos granitos que rodean la areola) tendrán algo de relieve.
• Náuseas: La sensación de náuseas o vómitos será algo más frecuente y tendrás sueño, mucho sueño.
• Cansancio: Aunque no seas consciente, estás realizando un duro y exigente trabajo sin cesar, por lo que es normal que te sientas más cansada y con sueño.
• Olores: Puede que haya olores que te molesten y que los percibas antes que otras personas que estén a tu alrededor.
• Estreñimiento: Algunas futuras mamás, comienzan a padecer algo de estreñimiento.
• Pis: Las ganas de ir a hacer pis aumentan su frecuencia.
• Ardor de estómago: Puede que las comidas te produzcan algo de ardor.
• Congestión nasal
• Antojos
• Cambios de humor: La alteración de cuerpo internamente, puede provocarte cambios de humos frecuentes.

Cómo cuidarte en la semana 6 de embarazo

Si hay un momento en la vida de las mujeres en las que han de prestar mayor atención a sus cuidados, es mientras están embarazadas.

Mantener una dieta equilibrada es esencial para que el desarrollo y crecimiento del bebé sea óptimo, pero además es beneficioso para mamá, pues podrá disfrutar de un embarazo saludable.

Por ello, aquí tienes algunas de las recomendaciones más habituales para este momento de la gestación:

• Realiza una dieta equilibrada, en la que incluyas pescado, legumbres, vegetales, frutas, cereales y lácteos, prestando atención a los alimentos ricos en ácido fólico, hierro, calcio y omega 3.
• Toma suplementos especiales para embarazadas que contengan ácido fólico, esencial para el correcto desarrollo del bebé. Seguramente, te lo habrá recomendado el personal sanitario especializado que controle tu embarazo, y si no es así, pídele consejo.
• Ten cuidado con los alimentos que pueden provocar toxoplasmosis o listeriosis, como es el caso de la carne poco cocinada, los embutidos o la leche no pasteurizada.
• Para luchar contra el estreñimiento, bebe mucha agua, toma alimentos ricos en fibra y haz ejercicio.
• Una buena manera de disipar los vómitos es ingiriendo alimentos de fácil digestión, beber abundante agua y hacer entre 5 y 6 comidas al día. Esto no significa que te atiborres a comer, sino que lo hagas más veces pero en menor cantidad.
• Si te levantas por las noches para hacer pis, intenta no beber líquidos antes de irte a dormir.
• Descansa siempre que te sea posible.
• Practica ejercicio para mantenerte en forma.
• Empieza a ajustar tu ropa al embarazo. Aunque todavía no tendrás un gran aumento de peso no volumen, seguramente sí habrás notado un cambio en los pechos, por lo que es conveniente que empieces a utilizar sujetadores de algodón y que no tengan aros.

Con estas prácticas, podrás llevar un embarazo saludable y sentiros súper bien, tanto tú como tu bebé.

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La información proporcionada en este artículo, en ningún caso debe sustituir  las indicaciones de la atención médica correspondiente.

Fuentes consultadas:

• https://kidshealth.org
• https://www.natalben.com
• https://www.reproduccionasistida.org

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